Pude haber escrito "como encontrar un padre espiritual (en el mundo)", pero no quiero que partan limitándose que sea un sacerdote y que sea hombre.
Se están usando ahora otros términos como "animador o acompañante" en este ámbito espiritual. Pero es probable que, si son latinas, no puedan sacarse la idea estereotipada de la "dirección espiritual". Y de esto, es lo que quiero comentar también.
No se si han visto la película clásica de 1943 de "La canción de Bernadette". Ahí se plasmaba lo que era tener un padre espiritual de verdad. Por eso, hago este post en su día.
Me estoy enfocando aquí para uds. que andan discerniendo su vocación. No es para lo que fue en sus orígenes: un guía en el camino de perfección o para comprender las experiencias místicas que empezaban a experimentar. Ni tampoco la idea que estamos a merced de los engaños del demonio y como mujeres, más encima, seriamos tan vulnerables a los errores que necesitamos de alguien que nos diga que hacer, que pensar, que ideas asir. Una conducción y no un acompañamiento, donde una tenga espacio.
Esto no es cápsula del tiempo. Por favor, filias, no entren en esos juegos sicológicos de lo que yo llamaba "jugar a san Juan de la Cruz" (con toda la admiración que le tengo a la obra de ese santo ¡me se de memoria varios poemas suyos de tanto rumiarlos! Pero si leyeran las cartas de dirección que tiene...de verdad da para entrar en ese cliché). ¡Si es que pareciera que estuviésemos en los tiempos del jansenismo donde la meta de la dirección espiritual era destruir la naturaleza humana, sus pasiones, su apego al mundo y sus creaturas, por la practica de la penitencia continua y mortificación en las cosas más absurdas! Como si la Gracia de Dios necesitará de esa retroexcavadora. ¡Quién hoy pudiese creer que no hay que tener amor propio porque estaba esa hipótesis que era el camino para acomodar "la voluntad de Dios" a nuestros pareceres?
Se trata de que les conviene mucho tener uno en este momento de su camino: una porque como les comenté, si ingresan, les van a pedir una carta "de recomendación" o de "presentación" de ustedes y para la superiora, es más ratificador que alguien las introduzca: alguien que las conoce tanto a nivel de su camino espiritual, que dará más confianza que un simple papel de un párroco que a lo mejor las identificó alguna vez en misa y eso, cuando le llegó el chisme que uds. tenían "vocación" ¡Chicas, es que no las pueden conocer! No hay C.V. que puedan redactar. Qué alguien con más "distancia" , objetividad , que lleva un bien tiempo viendo tu progreso "espiritual" tiene una voz más creíble que una joven a quien se le ve mucha ilusión, enamoramiento, entusiasmo (qué también importa ;-) o no se sabe si viene de una inspiración genuina
Y segundo, para uds. mismas. Me imagino que da un respiro entre todo este proceso que se lleva en lo íntimo, en lo impalpable, oír a una voz de este plano, que cree en ustedes (porque pudo ver los signos del llamado que una vez también sintió). Aunque el movimiento interior que les haga decir:- "sí, tengo vocación"-, va a venir de ustedes mismas, de esa voz propia, escuchada; entre toda la intangibilidad, sentir por fin algo palpable, audible, concreto, de este plano que siente el eco de sus almas; debe de ser un apoyo inmenso.
¡Además que por fin van a poder hablar con alguien que tiene la misma percepción (porque lo vivió )sobre lo mismo! Y que lleva todo el camino recorrido y que, debería, se esperaría, que mirase con simpatía a quien está en el primer escalón y quisiera ayudarte a subir.
Se que hay ahora directoras espirituales y que son igualmente válidas para el discernimiento vocacional. Yo conocí la "hermandad espiritual" tal vez. Tenía una amiga que se fue de monja. Con el tiempo, yo lo contaba muchas cosas mías, me aconsejaba, rezaba por mí, pero para mi siempre fuimos amigas, amigas espirituales, hermanas tal vez. Pero no era mi madre. No creo que ella me viese como hija.
La "paternidad" (entendiéndose como parenteral: padre o madre) espiritual es diferente. Hay una ascendencia espiritual. Por experiencia de vida. Hay una responsabilidad también. Le importas. Sabe que es el pastor a quien el dueño de las ovejas le confió ésta en especial. Te ven como a una hija que les manda Dios para que te acompañen, te lleven a buenos pastos. De hecho, yo saludo a mi padre espiritual en el día del Buen Pastor; para mí, ese es "su día". (Si filias, no crean que ando suelta por ahí😊. Si tan disidente no soy 😄). En ese sermón está todo:
"El que entra por la puerta es pastor de las ovejas.
A éste le abre el portero, y las ovejas escuchan su voz; y a sus ovejas las llama una por una y las saca fuera. Cuando ha sacado todas las suyas, va delante de ellas, y las ovejas le siguen, porque conocen su voz. Pero no seguirán a un extraño, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.
Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas.
Pero el asalariado, que no es pastor, a quien no pertenecen las ovejas, ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye, y el lobo hace presa en ellas y las dispersa, porque es asalariado y no le importan nada las ovejas.
Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas y las mías me conocen a mí, como me conoce el Padre y yo conozco a mi Padre y doy mi vida por las ovejas."
El portero es la intuición de tu corazón. Él te va a decir a quien te puedes abrir sin reservas y a quien no.
No va detrás arreándote con un látigo. Hay tanta confianza que tu lo "obedeces" porque sabes que te conoce bien, porque confias que lo que te propone viene de una buena intención (tú conoces ya su voz) y no anda mirando para atrás a ver si le sigues o le obedeces "ciegamente" o no. La soberanía es tuya.
Entonces:
-Tu padre espiritual no es tu gurú:
Él no tiene la respuesta (no te hace sentir así) , no ve por ti; no te quita el poder sobre tu vida. No es tu salvador, tu gurú.
Están caminando juntos en esto. Va a tu lado para discernir, pero el trabajo es tuyo, la responsabilidad de tu vida, es tuya. No puedes sentir que lo necesitas como si no tuvieses más piernas y que él, son tus muletas.
Porque va a pasar que te quedas sin él y ahí te quedas, no sabes como avanzar. No puedes tomar decisión alguna, porque necesitas que alguien te las valide; que te hagan sentir que te aprueban como persona. Y ¡ay, filia! Estar pensando en el fondo que :-"yo no valgo, yo no se; necesito esta persona, este colectivo".
Es cierto que lleva más recorrido, que pasó el umbral de la incertidumbre de que si tenía vocación o no, si podría llevar el compromiso...todo eso. Pero no se lo ha caminado todo en la vida. No te hace sentir eso.
Y si te pillas en ese deseo; querida mía, tienes que liberarte de esa tendencia al apego emocional. Y madurar. Ya te he explicado que aquí no pueden entrar como niñita, porque así te vas a quedar y así, no beneficias a persona alguna. Sobre todo :tú.
Paréntesis: el apego es algo que lo vas a oír en las vida monástica. El apego es un vínculo obsesivo. A objetos (que si desaparecen entran en un estado de ansiedad), a ideas, a estados emocionales, a personas, que lleva a considerar que sin esa persona, la vida no es vida.; que no puedes funcionar. Y cuando estás con ello/él, tienes paz.
Y estar desapegada es disfrutar de tal amistad, guía, situación, tecnología (celular filia, :-) sin sentirte atada.
Eses es tu termómetro. Por si acaso.
-Tu padre espiritual no es tu sicólogo
Filias, esto claro como el agua, en tu cabeza. Son apóstoles de Cristo. En el seminario no les enseñaron sicología y si hubo un ramo tal, debe de haber sido como el académico que tuve yo en la universidad, que ni para "introducción a la sicología" da.
Así que nada de andar pretendiendo que te arregle las taras. Ni menos demandarlo despóticamente.
Te dará la absolución de tus pecados, por medio de su ministerio; te dará consejos, dirá Palabras; pero, por ejemplo, en el mismo caso del apego: si es muy obsesivo, se necesita terapia y él no te la puede ofrecer. Te dirá que tienes que trabajar el autocontrol, pero es raro que te digan siquiera cómo, qué método.
Se puede sola. Sí, si eres lúcida y determinada. El Espíritu Santo puede elevarte. Sí. Una vivencia del amor de Dios te saca de cualquier cosa (pregúntale a santa Teresita de Lisieux), pero es algo gratuito de Dios.
Si ves que necesitas ayuda profesional, búscala. Irás más rápido. Yo recomiendo más un coach; por último alguien que maneje la sicología positiva. Y esto, hasta donde he vislumbrado.
También quiero prevenirte de la otra cara de este item.
Está muy de moda hablar de estos temas de hace décadas. Hay libros, información (pero no formación) de esto en internet. Y es muy fácil dárselas de sicólogo. De lanzar una etiqueta de diagnóstico clínico sin más, de vaticinar que tendrás tal o cual desequilibrio sicológico porque tienes tal personalidad (nada más porque casualmente, les recuerdas a alguien que vivió tal cosa...y puede ser tan estúpida esa proyección, como por una misma tesitura de voz) y dejarte caer un PREJUICIO inmenso sobre ti que te reste, te haga sentir menos válida.
Filia, nadie tiene sin, menos 6 sesiones, una formación académica de años, test, la facultad de decirte que "estás deprimida"," tienes una personalidad X" o que vas a caer en no se que trastorno si sigues o intentas tal. Así, por que sí; porque tienen una visión áurica. Los profesionales de verdad, se reservan incluso los diagnósticos para no etiquetar a sus pacientes. No dejes que hagan eso contigo. Al mínimo asomo de esto, lo paras ahí mismo. Con el argumento que te estoy dando, filia. Con todo la diplomacia que tengas, pero firme. No lo haces solo por ti. Estás salvaguardando a las hijas espirituales que le vendrán en el futuro. Es un favor que haces haciéndole ver que está siendo prejuicioso.
-Tu padre espiritual no es tu papá
Se que es fácil verlo así y de forma no tan inconsciente. Si no has tenido una buena "figura paterna" (como dicen ahora, pero a mi parecer nadie reemplaza el icono del padre biológico. He visto como crecen en carencia que siempre está pidiéndose que se llene con el hombre que sea, en niñas sin papá, demasiadas veces), si ha sido muy "bestia", "violento" o lo que sea; es natural que te salga tu niña interior con su genuino deseo de ser por fin paternada como lo deseaba su corazón de niña ( Pero es que nadie va a viajar al pasado, filia, nadie podrá sanar a esa niña más que tú).
Incluso, sin tener ese hueco, de tanto decirle:- "padre" -a tu director espiritual , de tanto oír que te dice :-
-"hija mía"-, se crea ese lazo afectivo de hija porque estás viviendo la verdadera paternidad. Estás frente a alguien que te da alas. Que potencia tu persona.
Que te anima a que alcances tus sueños.
Que te hace crecer en tu autoconfianza, que te hace sentir bien; jamás en la culpa ni en la vergüenza.
Que está contigo en las buenas y en las malas. (traductor: no te hace sentir mal ni te desprecia si te sales, no te gustó la experiencia monástica, no te aceptaron la candidatura; en fin, que no eres motivo de vanagloria).
Que quiere que no sufras daño. Estás cierta que te va a defender.
Que te considera. Entendió que Dios le pidió que acompañara a esa oveja especial de su rebaño, que la cuidara como a una hija y eso hace. Es él que apenas ve un hueco en su agenda, te llama para que vayas a conversar con él. Está pendiente de lo que es importante para ti y quiere saber como va. Sabes que reza por ti.
Caída de carnet, como decimos en mi país: Don Noel con Juan del Diablo de la teleserie Corazón Salvaje. |
Para mí, esta era la dirección espiritual: la relación que tenían estos personajes de la telenovela que se perdieron por haber recién nacido para los 90's, filias :-) Juan del diablo iba siempre a conversarle a don Noel, que era como su figura paterna. Le contaba de sus proyectos, de las decisiones que estaba tomando, le pedía a veces la opinión pero nunca era en plan de que le avalara sino más bien era alguien que le escuchaba desde su experiencia y del interés a su persona. Don Noel creía en Juan del diablo; cuando todos juraban que era casi un pirata, un desalmado, siempre vio y esperó lo mejor de su persona; nunca un prejuicio, apoyo incondicional. Mirada apreciativa. Sacó lo mejor de su persona, porque lo era.
A veces don Noel le decía sus tres verdades, le hacía ver las cosas cuando no estaban bien; pero las decisiones de su vida eran de él, de Juan del diablo. No lo "mandaba". Y lo veía como a un hijo. Le ofreció darle su apellido (era ilegitimo , por eso le decían "del diablo").
Y eso es un regalo, para ellos también. Porque la paternidad espiritual si existe. Los hijos e hijas para un hombre (y esto lo he oído de varones muy evolucionados interiormente) son los que él acoge como tales. Es decir, un hombre se convierte en padre a las semanas que ya nació su hijo. Es una opción. Así como lo leen. Tienen que pensar que por milenios de milenios, antes del patriarcado (llevamos como 4.000 años contra los los 196.000 casi prehistóricos), las mujeres sabían quienes eran sus retoños porque los veían parir. Pero los hombres no. Ellos cuidaban a los niños de su clan matrifocal: a sus sobrinos, pequeños hermanos y primitos.
Entonces, les es natural hacer suyo a una hija espiritual. Y está bien. Es parte de las recompensas que les prometió Dios por dejar todo por seguirlo.
Pero, una cosa es que haya una paternidad espiritual y otra es que te comportes como la niñita que eras con tu papá. Le puedes dar regalos para su día, preguntar como va si se enfermó, tener detalles con él pero filia, si hay algo que te voy a pedir en todo este blog, es esto: no te sientes en las rodillas de él; por mucho que te nazca de tu puro impulso de niña pequeña, consentida, mimosa y que lo veas al 100% como tu padre. No hija, jamás. Por el mismo.
Promételo. por favor.
Que si es un padre espiritual:
-Es un hombre
Así que ¡ coopera, filia! Por mucho que actue "in persona Christi" en los sacramentos., sigue siendo humano. (qué haya que estar explicando esto!) Uds. no se darán cuenta parece, porque ya van casi dos generaciones desde que la cantante pop Madonna implantó que lo cool era que se entreviese la ropa interior superior y con más contracte de colores, mejor. Y de ahí, al menos en mi país y más allá, las mujeres (sus mismos referentes) no p0nen atención a que no es de buen gusto ni delicado (no se que nombre poner, quiero decirlo en relación a que no estés dando pie a exaltaciones de la libido. Esto lo voy a explicar en un post especial sobre la castidad pero por si no lo habías internalizado: lo que para nosotras es neutro, para quienes tienen mucha más testosterona, no lo es) . Así que hija, se cuidadosa como te vistes. Si vas a usar poleras sin mangas, usa un brassiere sin breteles; lleva tu escote lo suficientemente tapado como para que cuando te agaches, no se te vea el corazón que forman tus senos. Si tu vestido de verano se trasparenta a trasluz, usa enagua (vas a tener que ir a un diccionario para saber que es eso :-)))
Y esto para todos los días. La elegancia no pasa de moda y, se supone, que eres una cortejada por Cristo, al menos. Luego serás su novia.
Y , aprovechando, cuidemos a nuestros sacerdotes tan perseguidos en estos días. Esto les va a sonar a Amma Angela, la conspiranoica, pero es que es tal cual: los enemigos de nuestra Iglesia ya lograron implantar el sesgo de que el mayor porcentaje de pedófilos está en el sacerdocio católico romano. Y, aunque se demuestre inocencia, ¿cómo le levantas la injuria de una acusación de abuso sexual, socialmente?
Yo me acuerdo que hace décadas (lo confieso), una amiga me comentaba como yo les debo de parecer ahora, de qué parecía tal sacerdote con las niñas que se le abrazaban y se quedaban así colgadas, a la salida de la misa parece. Claro, yo sabía que eran jóvenes que venían de esas realidades de padres "ausentes" y yo no podía ver mal alguno en eso ("todo es puro, para los puros") . Pero imagínense eso ahora. Lo crucifican.
Son tiempos tristes pero hay que tomar distancia. Yo recuerdo que de niñita, las profesoras eran muy maternales y se veía muy bien lo cariñosas que eran y ahora no se puede acariciar a un niño, a un pupilo por miedo a una denuncia por abuso. Y es que eso pasa, esta esa espada de Damocles ahora encima (lo digo en primera persona porque yo lo tuve que internalizar para con mis alumnos), y lo mismo para los sacerdotes.
-Es el amigo del Esposo
Esto lo digo Juan el Bautista cuando le tocó "desaparecer" ante el ministerio de Jesús. Él era el amigo del Esposo, que lo acompaña en la boda y se alegra por él. Pero sabe que el que tiene la novia es Éste y no él. Un maestro espiritual dirá que su rol es el de despertar tu espíritu al misterio, de abrir tu oído interior a la Presencia que mora en ti.
Paréntesis: sería maravilloso que te encontraras con un místico así, pero entre tanta actividad pastoral con la que cargan a los sacerdotes, la oración personal muchas veces no es lo más dedicada que se quisiera. Por lo demás, filia, me da la impresión que hoy, tu vida de oración es lo que menos peso tiene en la aceptación de tu candidatura.
Lo escribo porque es algo que yo escuché cuando recién estaba de dirigida y no me podía hacer la idea de que algún día iba a dejar de "necesitar" a mi padre espiritual, con esa soltura que me lo contaba una consagrada. Y ahora lo veo. Las personas pasan por tu vida (no significa que no las vas a ver nunca más, no es eso); vienen a darte una lección, a sostenerte en alguna etapa de tu desarrollo y después pasan. Y para tu siguiente nivel, te toparás con otras a las que estarás arrimada. Es normal mostrar una especie de devoción a un maestro, a una maestra pero a medida que una va madurando, cuando ya sabes escuchar tu propia voz, se va transfiriéndose al Maestro y una se va desapegando naturalmente. Una sigue siendo hija, de verdad; yo no me veo confesándome con otro sacerdote o no pedirle un consejo. Pero una se convierte en una hija adulta. Y esa es la idea. Esa es la misión de la paternidad. Que seamos autónomas, en la mejor versión de nosotras mismas.
-Es tu padre
Así tal cual. Y espero que tengan el regalo de encontrarse con uno. Yo digo medio en broma, cuando me toca explicarlo, que "madre hay una sola pero padres hay muchos". Y es así. Hay que vivirlo.
Aquí va lo de la ascendencia. No es tu amigo, al menos un sacerdote. Por mucha amistad verdadera que haya también, se apropiada en el lenguaje. Trátalo de ud.
Yo veo que está de moda ahora, en mi país, tutear hasta los papás Como si así le regalas juventud y caes bien o no se. Pero no, aquí no. Es tu director, tu confesor (perdonen que siempre me refiera a ellos, pero no tengo la experiencia de una asesora espiritual), es otro Cristo. Y así te vas ensayando, filia; porque en este camino vas a tener a todos y todas de superiores hasta que ingrese otra después de ti y a todo el mundo deberás tratar de Ud. al menos. La jerarquía existe y tal vez te resten puntos si te ven como una confianzuda. Ya no está los tiempos para referirse a un obispo como "su Ilustrísima" o a una superiora como "reverenda madre"; pero al menos, "Monseñor" y "Madre" deberás decir. Así que si tu habito de traiciona, mejor que sea con tu director, acá afuera, que no te va a vetar y lo vas internalizando para que se te haga inconsciente.
Esta es una secuencia de una escena tan bien hecha! Aquí el padre espiritual de Bernadette va a dejarla al convento y sabe que no la verá más, al menos, sin las rejas y se siente que de verdad, le arrancan a una hija. Casi todas las películas sobre santa Bernardita captan esa relación. |
-Amma Angela...¡qué suerte ha tenido Ud.! ¿cómo yo voy a encontrar una guía así?-
Hija, no ha sido así. Afortunadamente, no he pasado por todo, pero si me tocó mucho. Y yo simplemente creía que jamás me iba a poder abrirme a alguien, que no me salía expresarme, que eso de tener un director espiritual era para las que brillaban en las parroquias, para las que andaban "con la guitarra en la mano" (en mi medio, es convertirte en el centro de todas las simpatías y favoritismos), tener un inmenso carisma o no se; cualquier cosa que no era yo. O me topaba con puros sacerdotes que no irradiaban nada con lo que yo resonaba, no daban buenos consejos, no tenían tiempo para la dirección espiritual; así que sí yo lo obtuve, también tú. Así que si lo estás buscando (de nuevo, me refiero a un sacerdote; si ya la tienes clara, yo se que hay chicas con suerte que van a conversar con una hermana que las acoge de inmediato, en la congregación que quieren entrar y ella se convierte en su directora espiritual), aquí te dejo unos item.
- Se obvia, filia. Si buscan a un sacerdote, te vas a todas las misas a la redonda que tengas a mano (o sea, dentro de una distancia que te sea factible para ir cada mes hacía allá) y le escuchas la prédica, ves como celebra la misa, con que respeto, como se siente de cercano, de fiel a las enseñanzas de siempre de nuestra Iglesia (que haya que puntualizar esto, en que tiempos vivimos...). Tiene que irradiar felicidad en su vida de apóstol de Cristo, que valore la oración, la presencia de Cristo en la consagración. Acuérdate que tu vida es de contemplación. Tiene que hablar tu idioma sino te vas a decepcionar.
- Te pareció bien. Pues te confiesas un par de veces con él y después que te convence que estarías cómoda con él, que le puedes dar tu confianza, le cuentas que crees que tienes vocación y demás.
-"Amma Angela, ¡es que no logro encontrar a nadie entre las parroquias de mi ciudad"!"-
Tranquila, filia, que a mi me pasó lo mismo con los diocesanos, pero te voy a revelar mi as que tenía debajo de la manga: Vas y le rezas una novena al Espíritu Santo. Con toda la fe que Él va a iluminar a ese sacerdote para que te guie según Su Soplo y te lo ponga en el camino.
Yo lo hice. No tenía por donde que fuese así, pero la recé y fue un milagro. Pero de esos de verdad. Si a mi me pasó, a ti también. Reza y confía. Dios te está seduciendo, va a buscar todos los medios para atraerte.
-"Amma Angela, ¿y cómo voy a saber que es ese el que Dios me pone para guiarme?
Tú corazón te va a decir que estás bien. No es un cliché lo que te digo. Es tal cual. Ya está demostrado por la ciencia, ya no es cosa de estás mujeres medias brujas que salen con la intuición femenina o el sexto sentido. Filia, entérate: el corazón tiene un cerebro, hay neuronas en él y le llega la información del exterior 7 veces más rápido que al cerebro!
O sea, lo que te dice tu corazón: eso es!!! Cuando pasa a la mente ya se contamina con los miedos, los recuerdos de fracasos anteriores, creencias estúpidas que te hacen creer que "no te tienes que quejar, confórmate con lo que hay, es "la voluntad de Dios", tienes que ser sufrida, Dios está probando tu fe enviándote a este confesor que te machaca para ver si crees en la institución del sacerdocio..." y otras pavadas así. Filia, por favor ¡no te engañes con eso!,¡no juegues a no se qué historia de santa que soportó con tanta humildad que la maltratases por amor a Cristo. No.
- Te toca un lobo con piel de oveja
Desgraciadamente, me ha tocado casi de todo. Pudo haber sido peor. Menos mal que en ese tiempo se usaban los confesionarios, entonces no les vi la cara, pero me quedé a la absolución solo porque en el catecismo me enseñaron que era a Cristo mismo a quien yo le confesaba mis culpas; pero ante esas obscenidades disfrazadas de preguntas, yo no se como seguí en la Iglesia. En ese tiempo nadie hablaba de esto. Ahora se que debí haber salido corriendo y que siguieran hablando solos. Eso lo puedes hacer tú ahora, sin dudar. Y repetir esa oración de niña "Señor yo creo en Ti, no en las personas; yo creo en Ti, no importa como sea tal sacerdote, yo creo en Ti".
Una se va afinando con esto de que tu corazón te lo decía. Hace unos días me acordé que, en una de las veces que yo viajaba a la capital, una amiga me decía que como yo no había ido a hablar con el padre Karadima (si estás en Chile, ya sabrás de quien estoy contando), pero lo decía por cómo yo podía estar tan "out" ,cuando dirigía a los más influyentes de su medio y era una devoción no se. No me gusto por eso. Lo encontraba, muy de farandulismo, por muchas maravillas que oía. Y años después se destapó la olla. Fue el caso de abuso sexual más sonado en mi país, y cuando lo supe me dije -!"Annngelaa!"- "Qué razón tuviste" Pero no fui yo, que por mi mente no tenía como pensar mal, era mi corazón.
Bueno, tengo un post de este tema. Espero que lo hayas leído. Lo que quiero añadir es que eso de la obediencia no se debe malinterpretar. Esta como en el aire la sentencia que se debe seguir a todas las exigencias de un sacerdote. Y no, filia. NO.
Hay un libro que recoje un estudio sobre las religiosas abusadas. Está en francés. El comentario lo podrían traducir por google, si no saben. Siempre es la misma estrategia: adopta una postura de protector, de gurú, que se apropia de la confianza de su víctima y va abusando de su estatus progresivamente hasta violentarla.
Por eso tienes que sentirte digna y con pensamiento crítico. Es bueno que digas cuando no estás de acuerdo "No estoy de acuerdo", "no siento que deba hacerlo y no lo haré por eso". Yo lo digo a mi padre espiritual y le parece muy bien, porque estamos viendo entre los dos.(bueno, puedes se más diplomática: -"Gracias por su preocupación, pero ese no es el enfoque desde mi punto de vista. Consideraré si funciona para mi"-) Tienes que dejar claro que tienes pensamiento crítico pero desgraciadamente, parece que aún se ve de "buenecita ", estar de acuerdo siempre. Y más aún en la religión, que si no te sacan.
Pero ese es tu escudo.
Para no extenderme y que no lo escuches solo de mi, te dejo este enlace a un video entrevista. No tiene desperdicio. Todo el contenido de ese canal, es una joya.
- Te topaste con el inquisidor
Cuando les digo que me ha tocado casi de todo, es casi de todo. Aquí también tienen que salir arrancando.
No importa quien sea, que fama tenga, lo mucho que te lo han recomendado; aún sea la misma abadesa de donde quieres entrar. Tú sientes que cada vez que vas a conversar con él, eso como si comparecieras ante el tribunal del Santo Oficio, que hay cero feeling; que es como si estuvieses sentada en una silla enorme y al otro lado del desfiladero, distaaaaaaante, está sentado el gran Inquisidor y sales más mal que antes. Es un NO rotundo.
Si sientes que no te están leyendo tu alma como si fuese un libro abierto, que te restan en vez que te suman, que te cortan las alas, que te mandan a hacer cosas que te perjudicaran para ver si eres obediente y sólo porque él sabe más que tú; cuando tu sientes en tu corazón que jamás ha comprendido tu vocación. No, filia: no le hagas caso y no vuelves más.
Si el corazón no falla:
Tu hablas siendo tu misma, quedas aliviada, confirmada, feliz, luminosa, es:
Si tú sientes que te están condenando a la muerte en vida luego que intentas exponer tu deseo del alma sin que te escuchen, es:
Sí solo basta verte la cara, enmudecida, es que todo tu cuerpo te lo está gritando: óyelo, hazle caso. Es tu vida, tu felicidad. |
Y si con todo esto, aún no encuentras a alguien que te dirija y vives cerca de Hualpén, Puerto Montt o Santiago de Chile; escríbeme filia. Yo tengo a alguien para recomendarte a ti.
Bonne route!
Amma Angela
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